
ALBATROS PROMOTORA CONSTRUCTORA
10600 PLASENCIA
(CÁCERES)
En Plasencia, a 18 de febrero de 2009
Querido y estimado Daniel (empleado de
Albatros):
Tras la conversación telefónica que hemos mantenido esta mañana, he podido observar que desconoces los conceptos básicos de la buena educación y que a continuación te detallo:
DIVERSIDAD DE SIGNIFICADOS DE EDUCACIÓN.
Filosofía de la Educación: La educación nos ayuda a sobrevivir en la sociedad y nos ayuda a saber elegir las pautas que la misma sociedad nos propone. Si hemos tenido una buena educación, tendremos nuestros propios criterios y no nos dejaremos llevar como “borregos”.
Para hablar de educación nos referimos a distintos rasgos de comportamiento.
VIRTUDES DE UNA BUENA EDUCACIÓN
LA AMABILIDAD
El término "amabílitas" proviene del latín con un significado de amado, de ser amado o preferido. Se trata de una de las virtudes mejor valorada por todas las personas.
Hay una frase, del Dramaturgo y miembro de la Real Academia Francesa Alfred Capus, que nos indica qué es la amabilidad. Dice Capús que "Una persona amable es aquella que escucha con una sonrisa lo que ya sabe, de labios de alguien que no lo sabe".
Por otro lado, el pensador y escritor francés del Renacimiento, creador del género literario conocido como ensayo, Michel de la Montaigne afirmaba que "Aunque pudiera hacerme temible, preferiría hacerme amable".
SER CONSIDERADO
La consideración significa dar la misma importancia a las preferencias ajenas tanto como a las propias.
Fomentar la empatía y ponerse en el lugar del otro antes de actuar.
Algo que nos lleva irremediablemente a LA CORTESÍA que consiste en ser educado y tener buenos modales, en cualquier situación de nuestra vida diaria.
La GENEROSIDAD o el acto de compartir cosas sin esperar nada a cambio.
La TOLERANCIA, consiste en reconocer que alguien que no piensa como nosotros o actúa como nosotros, merece un respeto y que no es menos que nosotros.
Adorado Daniel, espero que puedas entender lo complicado del asunto, en caso contrario, te emplazo a que siempre que tengas alguna duda al respecto y seas incapaz de llevarlos a la práctica, no dudes en ponerte en el lugar de tu interlocutor, y analizar si te gustaría que te faltaran al respeto de la manera que tú lo haces.
He pensado que quizá tu actitud se debe a tu costumbre de soportarlo, tal vez por tu entorno, ya sea personal o laboral, no seré yo quién lo valore, por lo que me apiado de tí, y lo lamento profundamente.
No olvidaré pasarme mañana por tu oficina, no quiero que cumplas con tu amenaza, no me apetece nada perder todos los ahorros invertidos en una vivienda que según tú y los funcionarios de la Consejería de Fomento, en las circunstancias actuales, no puedo comprar por no pertenecer en pleno derecho al grupo 1 (unidad familiar), aún teniendo dos hijos menores a mi cargo.
De todas formas, recuerdo perfectamente tu advertencia , perderé el 30 % del importe total de las entregas a cuenta, aún después de verme obligada a tener que renunciar, porque no ha sido una opción voluntaria.
Recibe un cordial saludo,
Lídia